MAFALDA

Recientemente he "redescubierto" una caricatura legendaria: Mafalda. A partir de este momento, debo declararme fanática empedernida de esta pequeña precoupada por el mundo, la justicia social y la paz mundial. Su sarcasmo disfrazado de inocente es, por supuesto, una de las características que más me agradan de esta caricatura.

El hecho de que los amigos de Mafalda sean muy diferentes entre ellos resulta refrescante y generan situaciones graciosas e interesantes. Las "salidas" de Mafalda y sus amigos además de hacernos reir, nos llaman a la reflexión sobre un mundo que no logra conciliar la paz y una sociedad que ha perdido los valores y principios básicos que nos harían mejores ciudadanos.